Eran más o menos las 07:45h del domingo y me desperté con un dolor muy fuerte en la zona lumbar izquierda, me tomé un paracetamol y me acosté en la cama, pero el dolor no cesaba y cada vez era más fuerte. Asique llamé a mi cuñado Rubén para que me acercara al hospital ya que no me sentía con fuerzas para conducir.
Cuando llegamos al hospital me tomaron la tensión, el ritmo cardiaco y la temperatura. Después las típicas preguntas con el médico de guardia (alergias, antecedentes...etc.) y me pasaron a una sala para ponerme una vía y que me pudieran sacar sangre para la analítica y de paso utilizarla para ponerme un calmante para el dolor. Al poco rato el calmante hizo efecto y me quedé traspuesta (no llegué a quedarme dormida) hasta que vino una enfermera para llevarme a que me hicieran una radiografía de la zona que tanto me dolía.
Dos horas después, la doctora me dijo que había tenido un cólico en el riñón izquierdo y que en las radiografías no se apreciaba ningún signo de cálculo, pero que no se vean no significa que no haya (yuju pensé) asique me recetó varios calmantes, un antibiótico y me mandó hacer un cultivo para ver que bacteria me origina tantas infecciones de orina (la tercera éste año).
Por fin, a la 13h ya estaba en casa. Comí, dormí y cuando volvía a sentir el dolor me tomaba la medicación y perfecta durante las siguientes horas.
Desde entonces no me ha vuelto a doler, aunque me sigo tomando los medicamentos (por si acaso). El viernes tengo que ir al médico para que me de los resultados del cultivo, a ver qué me dice el buen hombre (que también tiene su historia para escribir sobre él en el blog) asique ya os seguiré informando.
Un abrazo,
Noe.
